El Banco Central llega al límite de emisión establecido por el FMI

De acuerdo al informe del Banco Central, la aceleración de la asistencia financiera ordenada por la ministra Batakis habría alcanzado 195 mil millones en las últimas dos semanas. Si fuese por seguir el acuerdo establecido con el Fondo Monetario, hasta diciembre, sólo se podrían emitir 35 mil millones de dólares. Para salir del trance hay consenso en que el BCRA recurrirá a los DEGs, la moneda emitida por el FMI con el único objetivo de afrontar pagos de bonos vencidos. Ya no se trata solamente de un Estado quebrado para hacer frente a demandas populares, sino que la propia dinámica del interés financiero camina al colapso.

El mismo esquema se repite a lo largo y ancho del mundo en una semana marcado por un mercado de supuestas innovaciones, ya sea mediante acuerdos comerciales con potencias emergentes como China o el recurrente escape de fondos en economías en desarrollo hacia paraísos fiscales. Pero se trata de recursos también limitados como lo demuestra la desvalorización propia del dólar y del euro. En el mercado «no oficial», hoy mismo otra criptomoneda ha declarado su quiebra y el corralito a quienes poseen sus valores.

En este marco, la política oficial se establece desde la Casa Blanca. La FED anunció hoy que, de mínima, durante julio es posible que la tasa de interés suba 75 puntos porcentuales. Se trataría de una duplicación de las ganancias de los fondos acreedores y una diminución a la pobreza de una porción gigante de la población trabajadora mundial. Es evidente que vivimos una situación inédita, incluso para quien pretenda negar un lenguaje catastrofista.