Las obras que estaban propuestas para desarrollarse desde el año 2015 fueron aceleradas “a pedido de las empresas internacionales luego de la invasión rusa en Ucrania” (El Cronista, 21/6). Según informa el mismo diario, Massa presentará los cinco mil millones de dólares invertidos por el Estado como “gastos de guerra” frente al Fondo Monetario con la expectativa de que esto acelere nuevos giros que le financien la campaña electoral. Pero – siguiendo al mismo periodismo financiero – el trámite no estaría del todo acordado.
Sucede que entre Pampa Energía de Marcos Midlin, ANSES, Tecpetrol de Techint y la franquicia de Pan American Energy que Bulgheroni comparte con la British Petroleum acaparan el 90% de las acciones correspondientes a la explotación del yacimiento. Sería de esta manera un pozo de “capitales nacionales”. El reparto ha generado una interna feroz. La petrolera Vista (de Galuccio) fue directa y oficializó la ruptura del acuerdo de precios de nafta firmado por Massa y lanzó un aumento por encima del cálculo de la inflación mensual. Marcelo Rucci, secretario general del gremio petrolero neuquino y también funcionario del nuevo gobierno, largó un carpetazo: denunció ayer (recién) que la obra se llevó la vida de 90 trabajadores, que las empresas se niegan a garantizar vehículos aéreos para quienes quedan atrapados en los pozos y que la jornada laboral mínima será de 12 horas, todo lo cual lleva a que “no está asegurada la inauguración (que iba a ser el 20 de junio) del 9 de julio”. “Va a haber conflicto”, amenazó.
Sería necio dividir la interna de negocios entre frentes políticos claros. En la concesión de la Hidrovía del Paraná sucedió algo similar: las empresas yanquis junto a las chinas se enfrentaron a las holandesas y belgas, lo cual parecería contradecir la situación bélica internacional. Es lo que pasa hoy en Jujuy, donde el sector que quedó por fuera de las explotaciones del Litio se ha vuelto partícipe de una “intervención federal” a la Provincia, ahora agitada por el ejecutivo nacional. La guerra internacional ha dado vuelta el mercado pero su reestructuración no está cerrada; el mismo día que Bill Gates se reunió con Xi Xinping, Schölz, primer ministro alemán, amenazó con el fin de su participación en la denominada “ruta de la seda”.
El enfrentamiento capitalista detrás de Vaca Muerta se manifiesta en la interna política del Frente de la Patria. Cristina Kirchner no participaría de la celebración o, al menos, ese ha manifestado Massa que es su deseo. La guerra mundial en estado de reorganización manifiesta este estadio aún en la Argentina; es el núcleo que explica la disgregación que preanuncian las encuestas.